La WWE está cayendo bajo, ya que su programa de los jueves se ha convertido en un desprtestigio total. En este año, en el correr de los meses se ha ido notando la baja calidad de el material de Smackdown, teniendo unas cifras muy preocupantes. Lo mismo ha pasado con RAW, aunque en menor medida. Smackdown ha marcado su peor rating desde 2010, ya que la marca azul tuvo una cifra de 1.652.000 espectadores, disminuyendo 600 de la semana anterior.
La WWE no parece muy decidida sobre qué hacer al respecto, pero de seguir así la audiencia seguiría descendidendo. Por lo tanto se podrían ver grandes cambios próximamente.
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